Aseguranza
«En esto conocemos que permanecemos en él, y él en nosotros, en que nos ha dado de su Espíritu.»

1 Juan 4.13

Una vez más, me impresiona 1 Juan 4 con su pleno llamado al amor en la iglesia.

«Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios» (7).

«El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor» (8).

«Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros» (11).

«Nadie ha visto jamás a Dios. Si nos amamos unos a otros, Dios permanece en nosotros, y su amor se ha perfeccionado en nosotros» (12).

«Y nosotros hemos conocido y creído el amor que Dios tiene para con nosotros. Dios es amor; y el que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él» (16).

«En esto se ha perfeccionado el amor en nosotros, para que tengamos confianza en el día del juicio; pues como él es, así somos nosotros en este mundo» (17).

«Si alguno dice: Yo amo a Dios, y aborrece a su hermano, es mentiroso. Pues el que no ama a su hermano a quien ha visto, ¿cómo puede amar a Dios a quien no ha visto?» (20).

«Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano» (21).

Sólo si Dios me mueve con su amor podré amar a ciertos individuos.

A El clamo. De El dependo. En El me apoyo. A El me rindo.

Sólo así los miraré con amor.

Sólo así pensaré de ellos con amor.

Sólo así actuaré y reaccionaré hacia ellos con amor.

Sólo así hablaré de ellos con amor.

Sólo así oraré por ellos con amor.

Sólo así platicaré con ellos con amor.

Sólo así les amaré como Dios nos ama a ellos y a mí.