Paz. Mucha paz.
«Mucha paz tienen los que aman tu ley,
Y no hay para ellos tropiezo.»
Salmo 119.165
Lectura: Salmo 119.161-168
Sigo esperando que Dios me saque de mis apuros y me rescate de mis problemas. En mi oscuridad, espero (y espero) que resplandezca su salvación.
Mientras espero, ¿qué haré?
«Tu salvación he esperado, oh Jehová,
Y tus mandamientos he puesto por obra» (Salmo 119.166).
¿Señor? ¡Auxilio! Y mientras espero más de tu acción a favor mío, seguiré obedeciendo tu Palabra. Ah, y en eso también necesito tu ayuda en gran manera.
Muy buena pregunta, ESPERAR, y mientras tanto ¿Qué hago?. Definitivamente obedecer, es la única forma, en que al tiempo perfecto, de Dios, obtengamos respuesta a nuestra necesidad, aún cuando el momento de silencio, sea casi imposible soporatar, Dios tiene su plan y actuará para Su Gloria. Alabado sea Dios por haber puesto en su corazón compartir estos pensamientos. Sabiendo que alrrededor del mundo habemos hermanos que tenemos en común la oscuridad en cierta área y en espera de que resplandezca su salvación.
Sigamos adelante y clamando auxilio al único poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos. A Él sea la Gloria.