El cuerpo de Cristo
«Además, el cuerpo no es un solo miembro, sino muchos.»

1 Corintios 12.14

Lectura: 1 Corintios 12.1-14

Desperté esta mañana sin ganas de leer la Biblia.

Me duele la cabeza. Aún estoy muy cansado. Tengo mucho que hacer. Estoy algo fatigado y desanimado en mi espíritu.

¿Le importará a Dios si — más o menos — le paso por alto esta mañana?

Pienso que sí.

Además, aunque no tenga ganas, puedo disciplinarme a hacer algo que me beneficie.

Así que leí el pasaje indicado. Y me topé con esta promesa:

«Pero a cada uno le es dada la manifestación del Espíritu para provecho» (7).

Hay dos manifestaciones del Espíritu Santo que me gustaría tener hoy: amor y paz.

(Por lo menos esas dos.)