Mis pecados; su muerte
«Porque primeramente os he enseñado lo que asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros pecados, conforme a las Escrituras.»

1 Corintios 15.3

Lectura: 1 Corintios 15.1-10

A muchos nos es fácil empezar algún proyecto, pero nos es difícil terminarlo.

Tal vez algo o alguien nos desanima, y abandonamos la cosa. Tal vez nos distraemos con otro quehacer, y dejamos a un lado el primer proyecto. Tal vez decidimos que no tenemos tiempo o no vale la pena o no acompletamos suficientes ganas. Tal vez se nos olvida el proyecto por completo.

Sea la razón la que sea, el resultado es el mismo: No perseveramos con nuestro proyecto hasta terminarlo.

¡No seamos así en nuestra carrera cristiana!

«Además os declaro, hermanos, el evangelio que os he predicado, el cual también recibisteis, en el cual también perseveráis» (1).

Hermanos, perseveremos en el evangelio.

Sigamos fieles en él hasta el fin.

Cueste lo que cueste.