Influencia Conyugal
«Porque ¿qué sabes tú, oh mujer, si quizá harás salvo a tu marido? ¿O qué sabes tú, oh marido, si quizá harás salva a tu mujer?»

1 Corintios 7.16

Lectura: 1 Corintios 7.1-16

La gran mayoría de adultos de casan. Eso es normal y natural, pues es plan de Dios.

Pero algunos Dios ha llamado a la soltería.

«Pero si no tienen don de continencia, cásense, pues mejor es casarse que estarse quemando» (9).

Tales solteros pueden ser un don especial a la iglesia y al reino de Dios. (Note los versículos 32-34.)

Así que cabe aquí advertirnos a no regañar a tales solteros por ser solteros. Tampoco debemos bromear o hacer chistes de su estado civil si a ese les ha llamado Dios.

¡Mucho mejor sería apoyarlos y animarlos y honrarlos y apreciarlos!